miércoles, noviembre 21, 2007

¿Dónde coño está mi estrella?


Y es que no es bueno pero tampoco malo,
tan prescindible como necesario.
Y el que esté libre y el recluso también
que tire la piedra o que me rule ya el mei.
(Los reconoces)

Necesito que aparezca la que me guía cuando me pillo una torta y la calle se hace doble, y me tiro dos horas intentando abrir la jodida puerta.
La que cose mis vesitiduras cuandos las rasgo en un ataque de cólera.
Golpeo mi cabeza intantando que mis neuronas choquen y hagan contacto, para poder recordar dónde la he puesto, dónde la he guardado.
La que evade mis problemas cuando aparecen y nublan mis ojos. Creo recordar que se marchitó y se ahogó en alguna jarra de cerveza de litro, o puede que acabase sus días dormitando cerca de un vaso de kali vacío o consumida cerca de un peta mal apagado.
Y grito a los cuatro vientos: "¡no te necesito!", imbécil de mí, como si fuese a escucharme...
¿Dónde cojones esta mi puta estrella?